La piratería es un problema al que se enfrentan escritores, editoriales y distribuidores. Una situación que genera mucha indefensión y que repercute negativamente, no solo en lo económico, y que parece haberse disparado a raíz de la digitalización de las novelas. Aunque es una lucha constante, en las últimas semanas las redes han vuelto a reactivar la problemática, con el fin de disuadir a quienes recurren a esta práctica, ya que es una cuestión de concienciación y de valorar el trabajo de los demás.
Hoy vamos a tratar de darle la vuelta a los argumentos habituales para defender el recurso de la piratería.
Leer es caro y no puedo permitírmelo
¿Sabías que en Amazon tienes libros por menos de 2.99€? Además, hay muchas lecturas por las que solo tendrás que pagar 0.99€, como por ejemplo mi novela CONTRATO SIN PREAVISO.
También tienes otras opciones de lectura gratuita. En Amazon hay lecturas GRATIS disponibles, así como si estás suscrito a PRIME, puedes leer sin tener que abonar nada. Y LEKTU, te permite leer gratis a cambio de compartir o difundir en tus redes sociales para dar a conocer libros y autores.
Es que yo leo mucho, quiero novedades de no-autopublicados, pero no me da el presupuesto
Hay plataformas como Nextory, antes conocida como Nubico, con la que pagando una cuota reducida al mes puedes leer todo lo que quieras.
Tal vez, no conozcas esta opción, aunque es bastante antigua. Se llama biblioteca y su red está distribuida por todo el territorio nacional. Si en tu biblioteca más cercana no encuentras el libro que deseas, pero está en el catálogo, puedes solicitarlo para que lo transfieran a tu biblioteca. Además, existe EBIBLIO, la versión digital de las bibliotecas tradiciones. Están actualizando constantemente su catálogo y te permite también acceder a audiolibros. Desde que la descubrí he recurrido mucho a ella para leer porque es bastante cómoda y tiene bastante novedades.
La cultura debe ser gratuita, universal y accesible
Precisamente porque la cultura debe ser accesible, sin importar los recursos económicos que se posean, se instauraron las bibliotecas. Sin embargo, parece haber cierto estigma con ellas, ya que son muchos los que alegan que recurrir a sus servicios es una vergüenza. "¡Eso es de pobres!", leí en redes respecto a leer en bibliotecas, algo que me descolocó por completo.
Entonces, ¿leemos por placer o por postureo? ¿Hay lectores de primera clase y de segunda clase? ¡Me niego a fomentar esa concepción que extrapola el clasismo a la lectura! El valor está en leer, con sus numerosos beneficios, no en si el libro lo obtenemos pagando o tomándolo prestado de una biblioteca. El problema radica en obtener beneficio de un trabajo que NO te pertenece. En NO valorar el trabajo y esfuerzo de quienes hacen posible que ese libro vea la luz.
Las plataformas y perfiles lo hacen por amor a la cultura
No idealicemos una práctica que atenta contra los derechos de los autores para sentirnos mejor con nuestra decisiones.
Las plataformas y perfiles que se aprovechan del trabajo de los demás, NO LO HACEN POR AMOR A LA CULTURA. No los convirtamos en el Robbin Hood de la lectura, cuando no es así.
Las plataformas de descarga NO oficiales o no autorizadas se llevan dinero por descargas o publicidad. El tráfico a esas páginas webs les genera beneficios. Es un negocio que se aprovecha del trabajo de otros.
Y esos perfiles que comparten libros piratas sin cobrar ni obtener beneficio económico, ¿hacen bien por el simple hecho de no llevarse nada? ¡No! Están robando a los autores dinero, esfuerzo y sueños porque, insisto, el daño de la piratería es algo más que económico.
Unos pocos libros GRATIS no hacen daño a nadie
Mentira. El éxito de un libro se mide por las ventas, al haber menos ventas, menos oportunidades para los escritores y menos variedad para los lectores. Hay libros que son éxito en descargas ilegales y... ¿sabes que se consigue con eso? Que el autor deje de tener una oportunidad editorial o de autopublicar al no poder costear los gastos que genera la publicación de un libro.
Esto sin contar con que estás ofreciendo algo que no te pertenece, sin autorización de sus legítimos dueños.
Los autores ganan mucho dinero, por unos céntimos que no ganen no pasa nada
Mentira. Los autores se llevan un porcentaje del beneficio, por lo que sí importa. Además, si bajan las ventas, repito, no se publican.
La piratería ayuda a los autores autopublicados a darse a conocer
La piratería ayuda a las plataformas de difusión de libros piratas. Los autores autopublicados, en su gran mayoría, no pueden vivir exclusivamente de las ventas de sus libros, pero esas ventas pueden traducirse en una mejor edición, una adecuada corrección o en la apuesta de una gran editorial.
Escribir requiere esfuerzo, tiempo y sacrificio. Ese beneficio, mucho o poco, que se obtenga es el reconocimiento del trabajo que supone sacar un libro al mercado.
Si no sabes si apostar por un autor autopublicado, siempre tienes la opción LEGAL de recurrir a las opciones GRATUITAS que ofrecen para darse a conocer. No obstante, me resulta curioso el poco valor que se le da a los libros autopublicados cuando también hay libros de editoriales que pueden que no te gusten y que consideres una pérdida de tiempo y dinero.
Tal vez, la piratería solo sea la punta del Iceberg de un situación más compleja y profunda que radica en la falta de respeto, empatía e infravaloración de la autopublicación.
Por último, me gustaría saber qué opinas sobre la piratería y, en el caso de que recurras a ello para leer, ¿podrías decirme las razones que te llevan a hacerlo? Quizás entre todos encontremos una solución a un problema que afecta a millones de autores en todo el mundo y que, repito, NO solo afecta a lo económico. La piratería genera pérdidas de empleo; reducción del catálogo de novedades; menos oportunidades para los autores; afecta a grandes y pequeños, ocasionando que los pequeños, desaparezcan... etc.
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